Acción Sindical
Después de solicitar entrevistas con todos los grupos parlamentarios, hemos trasladado a los miembros de Coalición Canaria (CC), Partido Socialista (PSOE) y Partido Popular (PP) las inquietudes del profesorado de cara a las elecciones del 20 de diciembre. Además, hemos aprovechado estos encuentros para recordar el compromiso del ejecutivo regional con la Ley Canaria de Educación.
Esperamos que, tras haber solicitado reunirse con los seis grupos parlamentarios, que el resto de formaciones atienda nuestra petición. El objetivo de estos encuentros es intercambiar puntos de vista sobre el estado de la educación en el país, especialmente en las Islas. La proximidad de la cita electoral hace que todavía sea más importante tener conocimiento de las intenciones de cada uno de los grupos en este sentido.
Por esta razón, consideramos que hay asuntos de vital importancia que no se están teniendo en cuenta. El artificioso debate generado a raíz del borrador del Libro Blanco del Docente ha servido para que políticos y ciudadanos se percaten de que hay que abordar el futuro de la profesión docente con altura de miras. “Las medidas propuestas por José Antonio Marina sobre el sueldo del profesorado o los centros donde deben impartir docencia los profesionales de más prestigio no sirven. Hay que apostar de una vez por el desarrollo del Estatuto Docente”, explica Pedro Crespo.
La necesidad de dar estabilidad a las plantillas es una vieja demanda de nuestra organización. Los últimos datos facilitados por la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias sobre el grado de interinidad del profesorado evidencian que hay un problema por resolver en la funcionarización de este colectivo. A este reto se unen otros recogidos por la Ley Canaria de Educación, como el incremento gradual del sueldo de los docentes y de la inversión en función del Producto Interior Bruto. Esta norma ha sido “la gran olvidada” por los partidos políticos. Por este motivo, esperamos que éstos se posicionen con claridad y cumplan con sus promesas, ya que –recuerda- que hay más de 21.000 docentes pendientes de lo que dicen los programas electorales sobre su futuro.
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