Acción Sindical
ANPE, lejos de participar en campañas ajenas contra la función directiva, destaca ante la opinión pública la importancia que tiene para la enseñanza pública el esfuerzo cotidiano de los centenares de directores y directoras que dan lo mejor de sí mismos, sin apenas recompensa. Pero critica, duramente, el poder que la Consejería les otorga para vetar la continuidad de determinado profesorado en sus centros.
Este sindicato siempre ha defendido en las mesas de negociación que la función directiva en Canarias está muy mal retribuida, y en ocasiones desprestigiada, por lo tanto, jamás cometería la tremenda injusticia de participar en ninguna campaña de acoso y derribo contra quienes son los auténticos motores que mantienen en funcionamiento nuestras comunidades escolares.
Es verdad que, en contadas ocasiones, han existido situaciones lamentables en las que un director o una directora ha utilizado mal sus competencias y, abusando del poder que emana del ejercicio de sus responsabilidades, ha impuesto su criterio de manera caprichosa sin tener en cuenta los derechos del profesorado destinado en su centro. En estos casos, como es natural, ANPE CANARIAS siempre se ha puesto del lado del trabajador, colaborando incluso activamente en la tramitación de sus denuncias ante la Administración Educativa.
Pero, en su inmensa mayoría, son unos magníficos profesionales que voluntariamente se ponen a disposición de la comunidad escolar en la que prestan sus servicios para emplear la experiencia acumulada durante años de docencia directa en la gestión y dirección de un ente tan complejo como hoy día son los centros públicos de enseñanza no universitaria.
No obstante, sin desmerecer lo más mínimo cuanto se ha expresado en los párrafos precedentes, ANPE CANARIAS desea manifestar públicamente su oposición a dos prerrogativas que la legislación presente y futura concede a la función directiva y que podría empañar su labor, provocando un daño irreparable a la imagen de nuestros directores y directoras.
Varias voces, entre ellas las de nuestros responsables educativos de la Consejería, se han alzado en numerosas ocasiones para condenar, con toda la razón, la posibilidad que la LOMCE pone en manos de quienes desempeñen la dirección de los centros docentes para seleccionar una parte importante de su plantilla con la fijación del perfil y los requisitos para ocupar algunas plazas, en base a su proyecto educativo.
Sin embargo, el Consejero de Educación mantiene un escandaloso silencio ante la controvertida potestad que la normativa vigente en Canarias les atribuye para “vetar” en la práctica la posible continuidad de determinados docentes en su centro mediante la emisión de un informe negativo.
ANPE CANARIAS quiere dejar bien claro que se opone frontalmente al ejercicio del “veto” para evitar la prórroga de un docente en el centro y, por supuesto, a la futura selección del profesorado que contempla la LOMCE. Nos parece que ambas capacidades exceden con mucho las responsabilidades que con tanta cordura y dedicación llevan a cabo actualmente nuestros directores.
Secretaría de Comunicación de ANPE CANARIAS (28/04/2013)



